A veces viene bien escibir un relato para apaciguar lo que te araña por dentro. EL HIJO-LEÓN Mis vecinos de enfrente, el señor y la señora Román, bajaron a tomar café al bar de la esquina con un león. El león parecía manso, pero no dejaba de ser un león. Me pregunté qué hacía aquelSigue leyendo «RELATOS»